En Uruguay, en la población rural se observó que 22 de cada 1.000 hogares se encontraban en situación de pobreza; 1 de cada 3 niños rurales tiene al menos 1 necesidad básica insatisfecha. 4 de cada 10 madres rurales no terminaron la escuela, afectando el clima educativo en el hogar e impactando desfavorablemente en el aprendizaje de los niños. Se suma a ello, que 6 de cada 10 escuelas rurales están clasificadas como de contexto sociocultural desfavorable. Además, 1 de cada 3 niños rurales abandonará el liceo antes de 3er grado, y sólo el 10% lo terminará (INE 2014). A lo anterior se suma que, al cabo de 3 años, el 50% de los maestros rurales habrán cambiado de escuela, debilitando la identidad colectiva de la misma. El aislamiento de la escuela y la falta de transporte repercute en el acceso a oportunidades formativas y de participación de los niños y maestros rurales.

Desde el año 2017 y para atender la situación en el medio rural, Edúcate Uruguay y Te Akau Ki Primary de nueva Zelanda, diseñaron un proyecto para impactar en el desarrollo de habilidades lingüísticas de los niños y niñas en lectura, escritura y oralidad alcanzando su alfabetización plena.  Nace entonces el proyecto Leer es un viaje. Luego en el año 2020, se lanza La Brújula: La aventura de escribir. 

Leer es un viaje busca que los niños quieran leer y que lo hagan cotidianamente. El proyecto crea un vínculo positivo del niño con el libro, mediante experiencias de lectura gratificantes. Una vez que el interés está instalado, se instalan estrategias metodológicas que transforman a los niños en lectores autónomos. 

Se realizaron 2 encuestas  en junio y diciembre de 2018, entrevistas con maestros y análisis de 500 diarios lectores (bitácoras de lectura que llevan los niños a sus hogares) de 150 estudiantes en 20 escuelas. Los datos muestran que Leer es un Viaje genera impactos positivos de recuperación, especialmente en los niños en situación de riesgo, comparados con los resultados de los estudiantes en las escuelas no intervenidas.