Habla para Alfabetizar (Talk For Literacy) es un programa de reforzamiento en capacidades narrativas y de comprensión oral dirigido a alumnos de primer año de nivel secundario, que cuentan con dificultades lingüísticas y comunicacionales. Se desprende entre dos subprogramas complementarios: el Programa de Intervención de Enriquecimiento de Vocabulario (Vocabulary Enrichment Intervention Programme, VEIP), y el Programa de Intervención Narrativa (Narrative Intervention Programme NIP).

La iniciativa fue desarrollada por Victoria Joffe, profesora en la Universidad de Londres, quién llevó a cabo un primer ciclo de proyectos piloto el año 2006 en 21 escuelas secundarias de la capital. Con el fin de profundizar la experiencia y sus resultados, el colegio Greenford High School decidió testear la metodología en sus alumnos. Las metas de aprendizaje que plantea Talk For Literacy son dos: promover el uso complejo del lenguaje (narración), y promover la comprensión en lectura (enriquecimiento vocabulario).

La pedagogía está centrada en el niño, lo que quiere decir que se adapta a sus capacidades y progresos. En el VEIP, se enseñan técnicas para reconocer la estructura de las palabras (prefijo, sufijo, raíces) para que los alumnos puedan entender y aprender nuevos términos de forma independiente. El programa NIP, por su lado, está enfocado en las técnicas de lectura (tono) y de los distintos registros narrativos. El VEIP y el NIP fueron desarrollados para ser complementarios, considerando por ejemplo, que en las sesiones del NIP se revisan los conceptos estudiados en las del VEIP. Tanto el VEIP como el NIP se concretan en dos sesiones semanales de entre 45 y 60 minutos respectivamente, que se desarrollan de la siguiente forma: revisión de los fundamentos de la sesión anterior, presentación de las tareas realizadas (las “misiones a alcanzar”), la presentación y resumen del contenido de la sesión y la definición de las “misiones a alcanzar” para la semana siguiente.

Las sesiones se dan en pequeños grupos, por un tutor asistido, por un asistente pedagógico y terapeutas del lenguaje. Todos fueron capacitados al inicio del programa en torno a la metodología y, específicamente, al concepto de “facilitación y obtención de respuestas”. Éste precisa una serie de técnicas prácticas para alentar los niños a encontrar por ellos mismos las respuestas, sin que el profesor les haya preguntado.